El sistema educativo actual fue concebido bajo las premisas de la cultura intelectual de la Ilustración que consideraba como verdadera inteligencia la que se basa en nuestras capacidades de razonamiento y en el conocimiento de los clásicos y de sus nombres: lo que se denomina habilidad académica; las circunstancias específicas eran las de la revolución industrial, su correspondiente imperativo económico y los términos de productividad.

En el comienzo del tercer milenio los cambios y nuevos retos hacen que este sistema educativo quede obsoleto y crezca cada vez más el interés por buscar nuevos métodos de educación que respondan mejor al despertar de los individuos y de sus capacidades en lugar de anestesiar su interés.

Así, con la idea de paliar estas deficiencias en la educación, nacen muchas iniciativas que tienen como fin mejorar el sistema existente. Una de estas iniciativas nace después de la Primera Guerra Mundial. El director de la fábrica de cigarrillos Waldorf-Astoria encarga a Rudolf Steiner la labor de crear una escuela para los hijos de los obreros de la fábrica, el objetivo era formar individuos libres. Cuatro meses más tarde, el 7 de septiembre de 1919, se iniciaron las clases en la primera escuela Waldorf.

¿Qué aporta la pedagogía Waldorf como sistema educativo? ¿Ha conseguido realmente crear un hombre nuevo como su fundador pregonaba? ¿Son distintos los individuos que han pasado por estas escuelas? La experiencia personal de una alumna de la Escuela Libre Micael de Madrid, el único centro que ofrece en España todo el currículo oficial exigido por el Estado Español hasta llegar a la Universidad, sirve en esta película documental de herramienta para conocer las bases de esta propuesta educativa.

Proyecto en desarrollo. Película/documental de creación 90'

Dirección. Sholeh Hejazi

Guión: Daniela Fejerman

Diseño: Raquel de la Fuente

Presupuesto: 114.824€